viernes, 20 de octubre de 2017

ANTONIA VILLAVERDE PUMAR, Pintora carballesa


Antonia nació en Carballo en 1920, hija de Antonio Villaverde Muniz, que regentaba una ferreteria en la que hoy es Gran Vía de Eduardo Prado, y de Dolores Pumar Pedrosa.

La pasión que Antonia Villaverde siente por la pintura se evidencia en su bata, adornada con alguna línea de color espada de su pincel. Un instrumento que se convirtió en extensión de su mano desde que una monja del colegio la elogió siendo una niña: Deberias dedicarte a esto".

"Me enamoré de la pintura, me siento en el estudio y pinto el mundo", confiesa Villaverde, sentada ante una ventana con vistas a la torre de control del puerto y la ría.

Su padre ya había establecido lazos con la cultura antes de que ella naciese, depués de haber conocido a un jovencisimo Pablo Picasso durante la breve estapa que el malagueño pasó en la ciudad, entre 1891 y 1895.